lunes, 21 de abril de 2014

Rodolfo Leandro Plaza Navamuel: Forjando honores - Por Carolina Mena Saravia



Este joven aunque experimentado salteño, martillero público, genealogista, historiador y bibliófilo lleva en su haber ocho libros de su autoría
SALTA.-  Lograr leer más allá del alma y distinguir los caminos por los cuales la vida lo llevaría, es algo que a Leandro Plaza Navamuel le ocurrió desde pequeño. Sumido en aquellas largas tertulias de familia, en las cuales participaba a modo de “polizón”, ese Cafayate de antaño representaba la delicia del relato, la mirada del pasado y la introducción a lo que sería su futuro.

Este joven aunque experimentado salteño, martillero público, genealogista, historiador y bibliófilo lleva en su haber ocho libros de su autoría. Alrededor de veinte publicaciones vieron la luz bajo su dirección en el Centro de Investigaciones Genealógicas de Salta -institución de la cual es vicepresidente-, en el Instituto Güemesiano y en otras entidades. Además es autor de una veintena de monografías y ensayos de investigación, difundidos en obras colectivas y publicaciones especializadas del país y del exterior. 



Una suma nada despreciable que cobra volumen con la cantidad de ejemplares ingresados a la Biblioteca Provincial Dr. Atilio Cornejo. Mientras ejercía las funciones de director –lo hizo durante cinco exitosos años-, recibió en carácter de donación por gestión personal, libros provenientes de los más variados puntos de América y de centros a los que él mismo pertenece. Durante su gestión esta prestigiosa institución cobró un vuelo inusitado con la organización de conferencias, exposiciones y muestras culturales.

“Sin proponérmelo, la vida me llevó a Atilio”, reflexiona Leandro, “él era genealogista, historiador y en su despacho de abogado yo me senté como director de su Biblioteca. También fue fundador del Instituto Güemesiano de Salta, del cual yo soy vicepresidente y director de publicaciones”.



El despertar de su pasión- vocación

Se define como genealogista, al contestar la indefectible pregunta con un contundente: “Sí. Aparte me diplomé en Tucumán en la Universidad de San Pablo, gracias a la iniciativa de un reconocido genealogista, el doctor Justino Terán”, contesta rotundamente Leandro.

“Mis comienzos fueron de la mano de María Teresa Cadena de Hessling, historiadora y profesora de la Universidad Católica de Salta. Cuando empecé a investigar ella estaba en su silla de ruedas. Yo la iba a ver, y desde su casa me aconsejaba para mi primer libro ‘Los de Lea y Plaza. Señorío y Tradición del Valle del Calchaquí Salteño’. Así me internaba en los pasillos de los archivos y bibliotecas”, recuerda de quien lo recibía con los brazos abiertos y el corazón dispuesto a guiar su sed de conocimiento, priorizando su presencia, aún entre la de los múltiples alumnos que esperaban ansiosos el tiempo para ser atendidos. (...)

Lea la nota completa en "El Intransigente":
http://www.elintransigente.com/notas/2014/4/19/rodolfo-leandro-plaza-navamuel-forjando-honores-240886.asp

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